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Cuidados de terapia ocupacional para personas mayores con demencia

Cuidados de terapia ocupacional para personas mayores con demencia

Continuamos con la serie de artículos con consejos básicos para aquellos cuidadores y cuidadoras que tienen una persona mayor con deterioro cognitivo avanzado o demencia, en casa. En este artículo, es el área de terapia ocupacional quien nos aconseja acerca de la comunicación, la estimulación cognitiva, el mantenimiento de las actividades de la vida diaria y la adaptación al entorno.

Facilitar la comunicación con las personas que padecen demencia

Algunas prácticas que podemos llevar a cabo para comunicarnos mejor con personas mayores que padecen demencia o alzhéimer son:

  • Situarnos ante la persona al hablarle. Antes de hacerlo es necesario que nos aseguremos de que está prestando atención y, si está sentada, debemos situarnos a la misma altura y mantener el contacto visual.
  • Utilizar un lenguaje sencillo, con frases cortas.
  • Hablar despacio y de manera clara.
  • Utilizar un tono de voz bajo y amable, para proporcionarle sensación de calma.
  • Eliminar los ruidos de fondo: la televisión, música, radio, ruido de la calle… pueden dificultar que preste atención a lo que le estamos diciendo.
  • Utilizar preguntas sencillas y cerradas para facilitar la respuesta.
  • Repetir la misma información o pregunta con las mismas palabras.
  • Darle tiempo suficiente para responder.
  • Motivar a la persona para que se exprese, no hablar por ella.
  • Utilizar la comunicación no verbal (gestos, caricias, imágenes...).

Consejos de comunicación con personas que padecen alzhéimer o demencia

Usar el tacto y situarnos a la altura de los ojos de la persona que sufre demencia puede ayudarnos a comunicarnos mejor.

Estimulación cognitiva

También podemos fomentar la comunicación y estimularlos cognitivamente haciendo algunos ejercicios sencillos en casa, relacionados con la orientación en el espacio y el tiempo, el lenguaje, la memoria y el cálculo:

  • Nombrar los objetos que hay en el comedor, cocina, habitación, etc.
  • Describir fotografías o situaciones.
  • Leer en voz alta.
  • Completar palabras.
  • Repetir dichos populares, cantar, recordar recetas.
  • Utilizar un reloj de pared para decir las horas, situar las tareas del día (levantarse, comidas, etc.), y un calendario para situarnos en la semana, evocar los meses del año, los días y las fechas señaladas.
  • Dictar y copiar números, hacer sumas y restas, ordenar números de menor a mayor.

Mantener las actividades de la vida diaria

En lo que se refiere a la vida del día a día también podemos tener en cuenta algunas recomendaciones:

  • No cambiar el estilo de vida que llevaba la persona antes de la enfermedad. En cualquier caso, es mejor simplificarlo.
  • Mantener el orden, los horarios y la rutina.
  • Intentar mantener siempre los objetos siempre en el mismo sitio.
  • A la hora de las comidas suprimir los objetos innecesarios de la mesa ya que pueden crear confusiones.
  • Mantener los hábitos motrices, adaptándose en cada momento a sus necesidades y siempre que no le ocasionen alteraciones en la conducta ni fatiga.
  • Solicitar su colaboración al vestirse o llevar a cabo la higiene diaria. Hay que tener presente que nos tenemos que adaptar a su velocidad y que si no le es posible realizar la actividad debemos ayudarle o suplir.
  • Tener paciencia y animar a la persona para que siga haciendo las cosas por sí misma.

Persona mayor saliendo a pasear con un familiar

Adaptar el entorno a las necesidades de la persona con demencia

Las personas con enfermedad de Alzheimer o con deterioro cognitivo avanzado son muy sensibles a su entorno. Este debe ser sencillo, estable y seguro.
Algunos aspectos que podemos tener en cuenta son:

  • No sobrecargar los espacios y, en caso de que sea necesario, suprimir elementos decorativos y/o muebles (evitar las alfombras).
  • Evitar los ruidos y sonidos innecesarios (TV, radio...).
  • Mantener una buena iluminación.
  • Dejar a la vista los objetos de uso cotidiano y los recuerdos personales, para evitar o reducir los períodos de ansiedad.
  • Ocultar objetos o sustancias peligrosos.

Si conseguimos tener en cuenta los aspectos de los que hemos hablado, haremos que la vida del enfermo sea más autónoma y gratificante.

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